martes, marzo 15, 2005

Artículo: El Peso de lo Irrelevante

Se dice que son los pequeños detalles los que dan la felicidad, pues yo descubrí que a la inversa también funciona... los pequeños detalles pueden echar a perder tu vida completamente.

Puede sonar mezquino, pero muchas veces en las noticias vemos gente a la que se le quema la casa y no nos importa; sin embargo en mi caso el mero hecho de no encontrar mis llaves por la mañana me torna histérico, suelo llamar a gritos a mi madre (porque es ya conocido que las mujeres tienen el don de encontrar las cosas) y generalmente tenemos discusiones por esa tontería, pero lo que importa es que siempre me encuentra las llaves y me restaura la paz.

Otro claro ejemplo de la impertinencia de los pequeños detalles en nuestras vidas (y en particular en la mía), se dio hoy durante mi matrícula, cuando a nadie parecía importarle lo bien que andaba el sistema en la universidad, hasta que de cientos de cursos me tuve que matricular EN UNO que andaba mal, allí si todos se dieron cuenta del pequeño detalle (y en lo personal a mi me arruinó el buen humor del día).

Es clásico ver como los "adultos", nos preocupamos por cosas sin sentido, por estupideces, proclamamos a los 4 vientos la esencia de las cosas sin darnos cuenta que en esa misma esencia se encuentra nuestra felicidad... nadie le hace caso a un médico cuando hay un partido de fútbol, pero notemos la tremenda diferencia entre una huelga de médicos y una huelga de futbolistas, la primera arruina la estabilidad del país, mientras que la otra sólo nos deja aburridos un fin de semana.

Es sorprendente como se le da valor a lo inválido y como se ignora lo importante; en un ejemplo relativamente discriminador y totalmente nacionalista yo vi 2 triunfadoras en el Perú el año anterior... por un lado Maria Julia Mantilla, la ganadora del dichoso concurso de subjetiva belleza que a mi calumniador parecer, simplemente ganó por caminar como una robot y sonreírle a todo el mundo... a ella le hicieron comerciales, promos, salió en todos los noticieros, a la hora siguiente del evento todos sabíamos que había ganado el certamen de belleza... por otro lado, a la tablista Sofía Mulanovich en su momento nadie le hizo caso, tuvo que pasar una semana para que yo me entere que había ganado... en la TV se seguían viendo promos de "Felicidades Maju", y nadie sabía que Mulanovich era una campeona total (y me parece que se invierte más tiempo/esfuerzo y neuronas en montar una tabla que en posar para un fotógrafo)... afortunadamente se le hizo justicia a Sofía en las semanas siguientes, pero demoró... ojo que demoró.

No quiero descalificar a nadie, esto sólo iba a tratarse de lo vitales que son los detalles en la vida y terminé hablando de surf, de hecho esto sólo iba a tener 4 líneas pero se transformó de súbito en artículo, y eso pasa por perder el DETALLE de que debía resumir mi pensamiento... detalles, la vida está hecha de detalles... como decía el maestro Liniers acerca del principito...

"Se dice que tiene miles de contenidos, analogías, enseñanzas, cosas que despiertan la bondad en la mente de los niños y que por eso es recomendable su lectura, pero cuando yo la leí por primera vez no me di cuenta de eso, a mi me gustaba la historia simplemente, lo que pasa es que para los adultos, lo esencial es invisible a los ojos."

MaTT

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