Artículo: La Attention Whore de la Combi

Cada vez que viajo en el transporte público me pasan cosas sumamente curiosas. Puedo afirmar que el reducido y, a veces, pestilente espacio interno de una combi es uno de los mejores lugares para conocer a las folclóricas y misteriosas criaturas que habitan la Ciudad de los Reyes y observarlos desarrollando sus extrañas costumbres en su hábitat natural, así como interactuando con el medio que los rodea.

Ayer vi una de las especies más raras y molestas que he conocido, y añadí a mi bestiario urbano toda una página dedicada a esta insufrible criatura: La Attention Whore de combi.

Bastó un tráfico agresivo en la avenida Benavides, para que compartiera mi valiosísimo espacio vital durante una hora con esta criatura, para mi desgracia dejé los audífonos en casa, así que estuve obligado a escuchar llamada tras llamada como este espécimen se comunicaba con todos los miembros de la libreta de contactos de su celular, diciendo cosas a cada cual más frívolas y vacías, peor aún, revelaba tanto que si yo hubiera sido un secuestrador con tiempo libre (e interés en tener a la víctima más desesperante de la historia) probablemente ahora la tendría en la maletera de un auto.

Por eso he decidido, en base a todo lo que escuché y lo poco que recuerdo, armar tres días en su vida y de esa manera demostrar que estas criaturas no sólo son antipatiquísimas e indeseables para cualquiera, sino que son tan soberanamente torpes que revelan información de forma irresponsable haciendo posible que un completo (y carismático) desconocido como yo, los publique en internet para que, eventualmente, alguno de los amigos de universidad de la criatura la reconozca y se ría de lo boquifloja y poco-pensadora que es su compañera. Lo más curioso es que la información que voy a publicar, probablemente es sólo el 5% de lo que dijo ya que sostuve una lucha titánica de aproximadamente 20 minutos para intentar ignorar todo lo que decía.

Un detalle más, si tú llegas a leer esto niña, agradécele a MaTT que no está revelando los datos más sensibles de tus conversaciones (porque a pesar de que me hiciste miserable durante una hora, me preocupo por tu integridad física) y para la próxima, restringe lo que dices en el transporte público, no reveles datos personales, no pongas en altavoz a tus amigas, no hables a gritos porque a nadie le interesan tus nimiedades y por lo que más quieras, deja de reírte como si acabaras de pasar por una lobotomía.

El sujeto:

- Nombre: Heh, no lo voy a revelar.

- Joven, probablemente 24 o 25 años.

- Cabello aparentemente rubio, no puedo precisar si teñido o no (jamás aprendí a detectar eso)

- Sobrepeso notorio sin llegar a ser obesa.

- Probablemente estudiante de publicidad.

- Tono de risa entre ronco y aguardientoso.

- Completa falta de criterio para hablar.

Viernes:

- Se fue a una fiesta de la Universidad Agraria.

- Le hicieron algo malo a algún amigo de ella (aparentemente conocido como "Dani"), lo cual obtuvo de respuesta un comentario de "Malditos cholos" (lo cual revela que ella sigue pensando que la "choledad" es una cuestión étnico-racial y no cultural).

- Conoció a un chico que la invitó a salir el día siguiente.

- Alguien subió una foto suya al Facebook con unas amigas gritando en el baño (lo repitió como cincuenta veces a diferentes contactos, la idea era ver si salía mal para saber si la foto debía borrarse o no).

Sábado:

- Buscaba un lugar para hacerse las uñas porque sus uñas parecían de "niña de 5 años".

- Dos amigas (creo que una se llamaba Aurora) le recomendaron dos lugares para hacerse las uñas, en uno la tarifa era de 70 soles, en otro de 20 dólares. En uno de ellos le sugirieron que busque a la señora Bertha que la trataría como una reina.

- Finalmente decidió ir a hacerse las uñas ese mismo día un par de horas después.

- Tiene una amiga que tenía algún tipo de problema de salud, que de cierta forma se agravó; su amiga tuvo que llamar a Pacífico para recibir tratamiento (y el sabio consejo que recibió de nuestra attention whore fue "pepéate", "pepéate hasta que se te pase").

- Quedó en salir en la noche con sus amigas, y llevaría al chico que conoció en la agraria. ¿A dónde?, la amiga que la invitó le dijo "No sé... allí vemos".

Domingo:

- Tenía un evento en Chaclacayo (me parece que se trataba de un evento de "Beberash"), por el cual iba a recibir algún tipo de dinero; no era su trabajo "oficial", sin embargo mencionó que "un dinero extra" nunca viene mal.

- El evento probablemente terminaría temprano, apenas terminase volvería a Lima para verse con sus amigas y si la memoria no me falla se iban a ir al cine.

Si consideramos la información que voluntariamente estoy omitiendo, la información que legítimamente no me acuerdo, y la información que no escuché, tenemos a una persona que en una hora le dio información personal a un montón de desconocidos. ¿Por qué?, sólo hay un motivo: es una attention whore, y una de la peor calaña. Y dado que a ella parecía no importarle, decidí hacerle un favor y colocarlo en internet para que aún más desconocidos se enteren de datos que no les importan.

Lo peor del asunto es que esta despistada me hizo cavilar en una triste realidad. Cuando esta molesta criatura que durante minutos había estresado a todos los que la rodeaban (y lo puedo afirmar por la cara de molestia de todos los presentes cada vez que ella decía alguna cosa) mencionó aquello de "malditos cholos" y obtuvo miradas reprobatorias e indignadas de algunos de los pasajeros del vehículo, un escalofrío recorrió mi cuerpo mientras que un pensamiento estremecedor cruzó mi mente a la velocidad del rayo y me dejó con un fuerte sentimiento de indefensión: "Con razón hay gente que quiere votar por Humala".

Dios nos libre.

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